Steamをインストール
ログイン
|
言語
简体中文(簡体字中国語)
繁體中文(繁体字中国語)
한국어 (韓国語)
ไทย (タイ語)
български (ブルガリア語)
Čeština(チェコ語)
Dansk (デンマーク語)
Deutsch (ドイツ語)
English (英語)
Español - España (スペイン語 - スペイン)
Español - Latinoamérica (スペイン語 - ラテンアメリカ)
Ελληνικά (ギリシャ語)
Français (フランス語)
Italiano (イタリア語)
Bahasa Indonesia(インドネシア語)
Magyar(ハンガリー語)
Nederlands (オランダ語)
Norsk (ノルウェー語)
Polski (ポーランド語)
Português(ポルトガル語-ポルトガル)
Português - Brasil (ポルトガル語 - ブラジル)
Română(ルーマニア語)
Русский (ロシア語)
Suomi (フィンランド語)
Svenska (スウェーデン語)
Türkçe (トルコ語)
Tiếng Việt (ベトナム語)
Українська (ウクライナ語)
翻訳の問題を報告
Pero, una vez que pasas por esa fase te das cuenta que la vida entonces tiene aún menos sentido si no la vives como quieres, disfrutando y sacándole el máximo provecho, al fin y al cabo, no tiene ningún sentido mas que el divertirse y vivir sabiendo que el día de mañana ya no podrás hacerlo y no habrás cambiado nada de nada, obvio, siempre y cuando respetes y no te metas con la vida de los demás
Eso sí, todos esos juegos te enseñan que la gracia de la vida es alcanzar la felicidad en cosas pequeñas, y tener un propósito en la vida que, siempre y cuando no afecte negativamente a nadie (al menos no de forma directa) aferrate a ello y todo irá (debería ir) bien.
Pog fa g, contenerse
No te puedo hablar por problemas de internet y te pasas al lado del odio de golpe. Aferrate a los amigos que tienes, porque Dios...
Si contestas de esa manera quedas muy mal, quedarías como alguien más maduro si directamente me ignoras.