No es un simulador de dios

[Invidit]

Es un constructor de colonias, y solo en este sentido, resulta divino. Podría decirse que es como una granja de hormigas esférica, llevando un paso más allá las características de Spore y quitándole la parte aburrida de constante creación de elementos.

Aquí se evoluciona por tecnologías y recursos, puro click y matemática. Empiezas con madera y piedra y acabas por chupar hasta la ultima gota de petroleo del planeta para sostener su continuo crecimiento, sin éticas ni culturas.

Es satisfactorio tomar partido en cada episodio de su avance al principio, y muy poco a poco, dejar que las "pepitas" o "nuggets" se las apañen por si mism@s. Es hacer su trabajo, en definitiva, pero de ninguna manera va a influenciarles y mucho menos a impresionarles.

Porque no es un simulador de dios. En Black & White todo cambiaba en función de tus acciones, hasta el punto que con tocar una simple piedra la convertía en objeto sagrado, con sus hormiguitas danzando alrededor. Con la opción de la criatura, rompía los moldes introduciendo un elemento casi ajeno al control del jugador/a, y aquí se encuentra la única semejanza, puesto que en Universim no controlas a tu población.

Se reproducen si quieren. Construyen si les apetece. Trabajan si les da la gana. Ya puedes tener los sencillos niveles de seguridad y felicidad al máximo que si deciden no avanzar, podrían dejarte horas esperando mientras se deciden a construir una simple casa, al tiempo que se extinguen por su propia negligencia.

Mientras que en Black & White, salvando sus numerosos bugs, la criatura era tan efectiva como impredecible. Lo mismo le daba por comer aldeanos, que conquistar el mapa entero sin que tu movieras un dedo. Era algo digno de contemplar. Y su sistema de aprendizaje, muy adelantado a su tiempo, era todo un subjuego al estilo Pokemon, aunque solo había 3 criaturas (inicialmente); las suficientes para alargar 10 veces más la duración del juego.

De Universim puedo decir que... lo han intentado. Pero no hay innovación. Bien pudiera ser un Trópico o un Sim City simplificando algunos aspectos y dándole una vuelta de tuerca a otros. No es un simulador de dios. Es un constructor de colonias, y todo gira en torno a la vulgar obtención de recursos.

El mundo necesita más Peter Molineaux, pero por desgracia solo nació uno. Y esta compañia, Cryptogames, jamás será Lionhead Studios. Y menos mal, porque seguramente la venderían al mejor postor dejando que la avaricia arruine sus obras de arte virtual.

Sigan intentando cosas nuevas, porque este NO es el camino a seguir. Es más de lo mismo, en modo esférico que está muy bien, pero no es rival para sus numerosos predecesores.

Queremos un Black & White III, y lo queremos bien hecho, sin EA o Microsoft de por medio. Cuento todo esto porque en conjunto si que he visto... algo. Una promesa, un deja-vu, una esperanza. Quizá algún día, cuando tenga más peso el amor a un proyecto vanguardista que la rentabilidad a cualquier precio.

Resulta paradójico que en pleno apogeo de la inteligencia artificial se sigan produciendo como churros copias y copias de los mismos motores y sistemas obsoletos de juego. Necesitamos diseñadores valientes, apasionados, y una compañía que deposite su inversión en ellos, no como un negocio asegurado, sino como una apuesta revolucionaria.