Lichdom: Battlemage es un buen juego de acción (yo no lo llamaría exactamente FPS debido a la gran influencia que tiene el autoapuntado, probablemente debido a las consolas). Tiene un sistema de combate muy sólido y ágil que se construye encima de una enorme variedad de hechizos y en la forma que tenemos de modificarlos para que se ajusten a nuestros estilos de juego (tanto de modo manual como con el Inventario Inteligente que, realmente simplifica el proceso de una forma bastante acertada). Su historia, como suele ocurrir en los juegos de acción, no pasará a la posteridad como el mejor guión de videojuego, pero cumple bastante bien su papel. Quizás lo que más se eche en falta sea algo más de variedad en los enemigos y que no se aprovechen las opciones que tendrían los hehizos para interactuar más con el entorno (electrificando el agua o congelándola, por ejemplo, estilo Magicka o Bioshock). También me parece un pequeño error el sistema que hay de mejora de los sigiles, que requieren un uso enormemente intensivo de los mismos, lo cual lleva a que al final acabemos usando solo tres (los que puedes llevar) y no aprovechemos las opciones que se derivarían de ir cambiando de sígiles y hechizos según las situaciones.

A nivel gráfico el juego cumple bastante bien y los resultados son vistosos, especialmente teniendo en cuenta que los escenarios son relativamente variados entre una fase y otra (pantanos, montañas nevadas, ciudades, desiertos...). El sonido cumple bien con las expectativas, especialmente los efectos sonoros y las voces, ya que la música pasa más desapercibida.

El resultado es un juego que está muy bien y que plantea otra forma de enfrentarse a la acción en primera persona que resulta bastante refrescante. Un 7,5.

Lichdom: Battlemage es un buen juego de acción (yo no lo llamaría exactamente FPS debido a la gran influencia que tiene el autoapuntado, probablemente debido a las consolas). Tiene un sistema de combate muy sólido y ágil que se construye encima de una enorme variedad de hechizos y en la forma que tenemos de modificarlos para que se ajusten a nuestros estilos de juego (tanto de modo manual como con el Inventario Inteligente que, realmente simplifica el proceso de una forma bastante acertada). Su historia, como suele ocurrir en los juegos de acción, no pasará a la posteridad como el mejor guión de videojuego, pero cumple bastante bien su papel. Quizás lo que más se eche en falta sea algo más de variedad en los enemigos y que no se aprovechen las opciones que tendrían los hehizos para interactuar más con el entorno (electrificando el agua o congelándola, por ejemplo, estilo Magicka o Bioshock). También me parece un pequeño error el sistema que hay de mejora de los sigiles, que requieren un uso enormemente intensivo de los mismos, lo cual lleva a que al final acabemos usando solo tres (los que puedes llevar) y no aprovechemos las opciones que se derivarían de ir cambiando de sígiles y hechizos según las situaciones. A nivel gráfico el juego cumple bastante bien y los resultados son vistosos, especialmente teniendo en cuenta que los escenarios son relativamente variados entre una fase y otra (pantanos, montañas nevadas, ciudades, desiertos...). El sonido cumple bien con las expectativas, especialmente los efectos sonoros y las voces, ya que la música pasa más desapercibida. El resultado es un juego que está muy bien y que plantea otra forma de enfrentarse a la acción en primera persona que resulta bastante refrescante. Un 7,5.